El «yo» quita la paz, quita la alegría, es como una uña del demonio metida en el corazón ¿quién se puede alegrar con una uña metida en el corazón?
“Como un pastor, el Señor apacienta su rebaño, lo reúne con su brazo; lleva sobre su pecho a los corderitos y guía… https://t.co/ad1YOviTKX